Throbs de The Fog Ensembles: sutiles atmósferas
Reseña del album hecha por:
SongBlog
Salónica se queda atrás del tamaño de Atenas y de la talla mundial como la segunda ciudad más grande de Grecia, pero se convierte en la primera fuente de inspiración musical para el trío de cosecha propia The Fog Ensemble. Throbs, el esfuerzo de segundo año de este conjunto de shoegaze instrumental - el guitarrista / programador Antonis Karakostas, el bajista Nicholas Kondylis y el baterista George Nanopoulos - combina una paleta de ensueño shoegaze, texturas post-rock, trip-hop atmosférico y las pulsaciones de Manchester Deep House en Crea un homenaje sonoro abstracto a la ciudad costera e histórica.
Nombres de pistas como "Fever Bliss", "Weather Girl" y "Droog Party" señalan las intenciones de la banda de evocar escenas sonoras más sutiles y más elusivas en esta ocasión. (Su álbum de debut homónimo de 2015 presentó títulos de canciones que apuntaban a entidades más concretas como "City Rat", "Subway" y "Cage"). Throbs sugiere que The Fog Ensemble puede haber superado simbólicamente su nombre. En lugar de sugerir una visibilidad restringida, una densidad casi estática o un estado mental de confusión, el nuevo álbum insinúa un sentido claro de la dirección y el propósito. La niebla proverbial ha dado paso a una niebla fina, que permite al oyente apreciar un ritmo más rápido sin abandonar por completo la sensación de estar perdido en un ensueño de otro mundo.
Escuchar a Throbs ha sido descrito como una experiencia cinematográfica; es fácil ver por qué. Karakostas, Kondylis y Nanopoulos son maestros del momento, el estado de ánimo, el momento y el suspenso, y orquestan hábilmente las fluctuaciones en el volumen, la intensidad y el ritmo para evocar un complejo viaje emocional. Hay indicios de melancolía, optimismo, inercia, lasitud y euforia maníaca que se encuentran entre sus melodías y ritmos persistentes, pero ninguna emoción singular está suficientemente en primer plano sobre las demás. Estas no son canciones para cielos despejados o fuertes aguaceros, sino para esos momentos raros en el medio, cuando se está inquietando en qué dirección cambiará el clima.