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Top10: Decálogo sonoro venezolano 2016

Reseña del artista hecha por:
SongBlog

Se acaba el año y es justo, además de interesante, repasar los mejores discos del año en Venezuela. Ya sea por su aporte, éxito, contenido, receptividad o contexto, los factores varían según el caso. Fue un año difícil eso sí. Cada quien sorteó sus posibilidades para mantenerse en la palestra. Se sintió el exilio. A pesar de la oleada de discos que se avecinan para el 2017 de aquellos que partieron, este 2016 significó un reto para los que aún siguen por estos lados.

Entender su entorno, darle vida a sus composiciones en tarimas y acrecentar el interés de un público estoico, a ratos escéptico, fue el mayor obstáculo enfrentado por muchas bandas.Aquí un resumen de los diez discos que sobresalieron en el año, los que dejaron un marca con sus composiciones y aquellos que en su andar salvaron a sus escuchas del letargo político de estos doce meses.

- 10 -

GUSTAVO CASAS - AMARILLO

El cantante, compositor y guitarrista pasó por un periodo de introspección y búsqueda artística hasta que se sinceró en calidad de solista como Gustavo Casas y Los que Buscan. Lo suyo es un indie pop esperanzador y bohemio que acaricia el folk. Sorprendió con el videoclip de "Verte ya" como primer adelanto de esta producción en la que exterioriza toda la abstracción que rige su personalidad. La madurez se siente, las historias hablan de un personaje sensible, marcado por la exploración humana y el reencuentro de su propia condición de hacedor de canciones, sobre todo minimalistas; ésas que entablan el universo privativo de un cantautor despojado de todo interés mediático. Más que una vuelta a sus raíces sonoras es un giro a su esencia intuitiva.

- 9 -

VARGAS - RADIOCASSETTE

Desde la influencia armónica de Los Ángeles Negros, Pedro Infante y José José, las melodías siguen aproximándose al jazz y al blues. El cantante y compositor falconiano asumió responsabilidades en su vida, en medio del contexto lírico que suponen sus canciones, esas que denotan un poco de inseguridad hacia las relaciones y la convivencia del ser. Así presentó su tercer disco Radiocassette, donde el artista siguió su intuición, además de contar con la colaboración de los raperos Pyscho y Gona. Aunque se regocija en el pop, tomó el riesgo de improvisar durante el proceso de grabación. El resultado es un disco tan personal como atractivo.

- 8 -

WINCHO SCHÄFER - AMOR DE MADRE

Todas sus afiliaciones a bandas quedaron atrás y desde su debut en solitario con Otra Realidad (2014), llegó cierta serenidad en su propuesta. Su segunda placa Amor de Madre sigue con la introspección de un personaje que busca la armonía que habita en sus venas. Es el reflejo de una pesquisa como individuo, aunque de alguna manera exorcice demonios pasajeros. En medio de esta continuidad de su carrera Wincho estrenó hace poco el video clip para el tema "Falsa alarma", dirigido por el destacado fotógrafo Francisco Acuña, donde la sucesión de imágenes guardan una influyente complicidad con David Lynch.

- 7 -

OCTAVIO SUÑÉ - T.O.D.O

Una docena de canciones retratan las vicisitudes de Octavio y lo definen como uno de los sobrevivientes de aquella generación de músicos independientes venezolanos que entendió el compromiso con su arte y el público. En este álbum se planteó un nuevo reto artístico y personal. Es denso, a ratos se siente un sufrimiento en el tono de voz. Canciones con una atmósfera musical personal, sonoridades en paralelo, frases como sacadas de la literatura, guiadas por metáforas. Sebastián Ayala (La Vida Boheme), Tomás Mena (Joystick, Chucknorris), Luis Clavell, Leonardo "" JaramilloEl Kmarón (Okills), Víctor Rodríguez (Los Humanoides, Charliepapa), Pablo Fernández (La Misma Gente), Pedro Guevara (Bárbara Victoria), Jesús Vásquez (Percucello),Camilo de Castro (A Lo Flamenco), Joaquín Phelan (Lebronch), Adrián Corredor, Leyxer Cardoza y Mariaca Semprun, hacen sus aportes en los doce tracks de esta placa producida por el propio Suñé. Es también esta complicidad y camaradería lo que proporciona el rompimiento de una maldición para él, la de darle continuidad a sus proyectos.

- 6 -

LA ABUELA DISCO - GENERADOR

Esta placa conserva cierta intimidad y sosiego. Sus once temas denotan una búsqueda: el entendimiento de las relaciones amorosas, las cotidianas, las humanas, incluyendo el ambiente político del que los músicos no son ajenos. Fauadz Kassen (Voz y guitarra), Fuaz Kassen (Guitarra), Arnoldo Freitez (Bajo), Ignacio Landáez (Batería) y Eduardo Daza (Sintetizadores), muestran en su segundo álbum un sonido contundente que si bien expusieron un lado pop y acústico en diciembre pasado con el tema "Modelos de paz", un llamado de reflexión sobre los problemas sociales que se viven en Venezuela; ahora se embarcan en una oda ochentera en temas como "Eva por Hada", junto con un video dirigido por su vocalista Fauadz, donde el tecladista Eduardo se encargó del diseño de arte, edición y montaje.

- 5 -

RAWAYANA - TRIPPY CARIBBEAN

La tercera producción de Rawayana los ubica en una posición privilegiada. Asumen un riesgo sonoro que, si bien parecía obvio, su ejecución en la práctica tenía sus aristas considerables. El Trippy Caribbean fue producido por José Luis Pardo, ex guitarrista de Los Amigos Invisibles y pieza fundamental de Los Cremas Paraíso. A partir de su reggae característico, hay una buena dirección en la aproximación al funk y el dance, desde una forma meticulosamente concebida. Por supuesto que lo caribeño destaca, el soul se cuela y siguen coqueteando con el hip hop gracias a la invitación que le hacen a Apache. El sentido del humor como base de sus letras se refuerzan con madurez. Rawayana alcanza un elevado estatus musical en el país, el que fue construyendo sigilosamente en tarima. Ya van para los diez años desde que iniciaron este viaje sonoro y se evidencia ese cúmulo en experiencia y lucidez.

- 4 -

TOMATES FRITOS - TOMATES FRITOS

La banda lanzó una docena de canciones que llegan en un momento en el que la agrupación toma un nuevo giro en su trayectoria: apuesta a sus influencias ochenteras, dejando atrás el southern-rock del que sacó partido en sus anteriores trabajos. Aquí destaca las guitarras estilizadas y el uso consciente de sintetizadores. Una parte del álbum tiene una característica new wave, coqueteando con el synthpop, incluso usando el falsete en las voces y algunos guiños al post-rock. Su cantante y compositor, Reynaldo Goitia, aborda el tema del arrepentimiento, la desilusión y la búsqueda, trazando una línea entre esperanza y despecho. Sin dudas se trata de su trabajo más arriesgado hasta la ahora. Es el Tomates Fritos menos alegre y más consciente, y en el recorrido, la lucidez y discernimiento de dos décadas de formación dan un resultado coherente, producto del trabajo consciente de una agrupación siempre perseverante.

- 3 -

#YEI - BARRIENDO ESCOMBROS DESPUÉS DE LA FIESTA

El artista engrana una serie de ideas y posturas sobre la base de sonoridades que a pesar del uso de sintetizadores, el cargamento lírico le otorga peso orgánico. Una placa que suena a exorcismo de incomodidades personales, la políticas y un ejercicio de influencias musicales que se entrelazan por las motivaciones de #YEI. Se mofa del amor perfecto, sufre la pérdida, invoca a los escuálidos milicos, dispara a los comunistas, los sobrinos de la narco familia, las niñas sifrinas de buen andar, los bolichicos, usa mensajes presidenciales, le tira al reggaeton, señala a los actores con ínfulas de alcaldes. Tampoco omite su búsqueda con optimismo. El sarcasmo y humor negro es el hilo conductor. Pop, ambient, indie, big beat, trip hop, funk, acid-folk, rock and roll e ingenio sonoro se entremezclan en la propuesta. #YEI resurge de las cenizas expulsando las contrariedades más notable de su cuaderno compositivo, las que ese baúl inquieto de la sonoridad consiguió su evolución natural.

- 2 -

DESORDEN PUBLICO - BAILANDO SOBRE LAS RUINAS

Nuevamente Desorden Público olfatea y construye una fotografía de la Venezuela golpeada, haciendo una declaración optimista de construcción y aguante. Bailando Sobre las Ruinas es una contraposición de lo que significó hace diez años el álbum Estrellas del Caos (2006), donde si bien criticaban el escenario de desconcierto que se avecinaba, lo de ahora se presenta como un adiestramiento o manual de supervivencia para sobrellevar el cataclismo actual. Antes advirtieron lo que vivimos y ahora se presenta como una muestra de que su tesis social y profética se ha cumplido. Tiene un particular y acertada percepción en el mensaje implícito. Celebrar y disfrutar a pesar de la tragedia. Hay una coraza humanitaria a ritmo de ska con guitarras distorsionadas que desencadena la esencia de Desorden Público. El mood salsero, la construcción y mantenimiento del condimento latinoso de la banda se engrandece y metafóricamente se conecta con el estado de ebullición de una nación volátil. Este nuevo trabajo está lleno de despedidas, insinuaciones políticas, convoca la alegría de quien opta por ver la luz al final del túnel. Prevalece la esperanza, la búsqueda, la reconciliación interna. El orgullo cultural se profundiza entre la sátira, el humor y la diatriba, ambientados dentro de la zona ska, reggae, mestizaje, rock latino y el desarrollo de sonidos distorsionados que, a estas alturas es el trademark y lenguaje característico de Desorden Público como institución activa de la música contemporánea de Venezuela.

- 1 -

LUIS IRAN - LA METAMORFOSIS

En ocho temas y en poco más de treinta minutos Irán describe, sin pretensiones, su realidad personal y su adaptación a una nueva situación musical y humana. El valor de su trabajo tiene más que ver con la continuidad y la resistencia que con la velocidad de los tiempos. Su rol de padre lo lleva a meditar sobre el mundo en el que convive junto a su hijo de tres años, Lucas Reyes, el protagonista de la portada del disco. La Metamorfosis fue un nuevo reto en su carrera, la de solista, una reinvención espiritual, moral y humana, en la que la narrativa de sus canciones se vuelve parte de quien las oye y conecta. Sus melodías trazan la personalidad de un músico que se decanta por estructuras compositivas con autenticidad y personalidad. El valor superlativo de ésta producción está en el mensaje. Al otro lado de la acera, donde se observa la descomposición social, el caos político y la decadencia humana, su misiva sobre la familia, cumple un rol motivador. Es la sencillez y honestidad a partir del compromiso paternal lo que desencadenó este excelente disco, el mejor del año por lo necesario e inesperado.

 

 

 

 

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