Una segundísima de primera

En el mes del amor se han dado y se siguen dando conciertos, recitales. Por estos días, uno de esos conciertos lo da la venezolana Mirtha Pérez.

Y vale la pena la ocasión para recordar a esta gran cantante, dueña de una voz dulce y potente a la vez. En los años 60 y 70 fue una de las principales vocalistas, impulsora de la canción romántica, las baladas, los boleros.

Mirtha es prácticamente una niña prodigio, y aunque nació en 1945, comenzó a cantar a los trece años, y profesionalmente a los diecinueve años de edad con Los Naipes. Allí, en esa banda, se hizo famosa con “Las cerezas”, “La luna y el toro”, entre otras canciones.

Por supuesto, la cantante buscó nuevos horizontes, y su carrera fue ascendente, incluso, durante la década de los setenta fue interesante el panorama musical venezolano del momento, liderado por Mirtha y Mirla Castellanos. Ésta última apodada “La Primerísima”.

Mirtha también ha incursionado en el campo de la actuación, interviniendo en varias telenovelas. Incluso, en 2010 protagonizó una comedia teatral, “La Segundísima”, en donde remoraba aquellos años. Por cierto, ese humor teatral vale para rescatar algo interesante: Mirtha tuvo su propio lugar dentro de la escena musical, al igual que Mirla Castellanos.