Covers para admirar, amar, odiar y olvidar
Yo era de los que por algunos años creí ciegamente que “Oye cómo va” había nacido de la mente creadora de Carlos Santana. Era un niño que aún no llegaba a la primera década de vida, por allá en la segunda mitad de los años 70, y en las emisoras juveniles de Caracas el tema sonaba con insistencia.
Ese sincretismo de ritmos latinos con elementos del rock fue para mí una bendición auditiva. Un imberbe al norte de América del Sur, con constantes paseos frente al Mar Caribe, sintió que “Oye cómo va” acariciaba sus raíces pero al mismo tiempo le hacía volar en un género del cual ya empezaba a contagiarse.
Pero cual epifanía de pronto algo cambió de golpe. En alguna transmisión hertziana el locutor desliza algo que resultó una sorpresa: “Escucharemos a continuación a Santana con ‘Oye cómo va’, versión que hace del tema de 1963 del maestro Tito Puente”. Se rompió la inocencia de quien pensaba que los artistas solo interpretaban temas propios, aunque no era el único en todo planeta para quien una adaptación musical podía pasar desapercibida.
Son muchos los episodios en los que ciertas canciones terminan asociadas para siempre con una banda o solista, y pocos sospechan que es una añeja grabación. Eso que en un momento simplemente se denominaba versiones y hoy se les dice con algo más de glamour: “covers”.
En el caso de Santana podemos calificarlo de un cover muy afortunado, de esos que opacan a su original, como también lo fue “With a Little Help from My Friends” con la interpretación fulminante de Joe Cocker frente a los cuatro de Liverpool. Otros en cambio son para el olvido, considerados un verdadero sacrilegio por los amantes de la música. Solo recordemos lo que produjo en los rockeros escuchar a Britney Spears con “Satisfaction” de Rolling Stones.
Si bien las versiones han estado desde siempre en el negocio de la grabación ¿qué tipo de alternativa significan para productores, arreglistas e intérpretes? Hay quienes las califican de pereza creativa o facilismo a la hora de conseguir un hit, aunque muchos las defienden como un interesante experimento que enriquece la oferta sonora que puede disfrutar el público.
AQUELLA INFELIZ MELODÍA DE BONO
Henrique Hoffman aprovecha un break comercial en su espacio vespertino de la emisora caraqueña KYS 101.5 FM para hacer un poco de memoria sobre esos covers emblemáticos. Con 44 años en el mundo de la radio, son muchas las historias que tiene en sus recuerdos, pero no duda en apuntar que “You Made Me So Very Happy” (1969) de Blood, Sweat & Tears es su versión favorita. "Porque muchos creen que es el original", explica su escogencia quien también presta su talento para HBO Latin America Group como announcer on air de Canal Max y Radio Mágica de Lima, Perú en las identificaciones.
Y es así, ya que “You've Made Me So Very Happy” se dio a conocer en agosto de 1967 por parte de Brenda Holloway, una de las coautoras junto a Berry Gordy, Jr.,Patrice Holloway y Frank Wilson. Blood, Sweat & Tears la versionaría dos años después, pero con mayor éxito en las carteleras que su predecesora.
A la hora de hablar de un cover que haya superado en calidad al original, Hoffman nos señala a “Got To Get You Into My Life” de Earth, Wind & Fire, de 1978, compuesta en 1966 por John Lennon y Paul McCartney para The Beatles. Sin embargo, es inclemente al cuestionar el Sgt. Pepper's Lonely Hearts Club Band, editado por RSO ese mismo año o la “Unchained Melody” de Bono y U2 en 2006, como versiones infelices o dignas de ser borradas para siempre.
“Lo ideal, sin duda cuando se piensa en versionar es planteárselo como alternativa sonora interesante, pero no creo que lo tomen así siempre, sino que priva en la mayoría de los casos una forma fácil de alcanzar un éxito”, sostiene.
HENDRIX NOS DA UNA FABULOSA "EXPERIENCIA"
“Una versión es, en muchos casos, la evidencia del gusto que por la composición y grabación original profesa quien la vuelve a grabar. Es la ‘óptica musical y personal’ del artista, banda u orquesta que la interpreta, ya sea en vivo o grabándola. A mí me gustan mucho las buenas versiones, me divierten, me interesan”, comienza su reflexión Julio César III Venegas, locutor y DJ venezolano.
Para hacer su ránking personal apela a sus recuerdos radiofónicos, medio donde ha estado varias décadas. Es así como surge el nombre de una canción que ha colocado en muchas ocasiones al aire, “Down by the River” grabada en vivo por Buddy Miles (1971). “El baterista y cantante, junto a su banda, la llevó al género soul con una duración de 13 minutos y 28 segundos. La original, de Neil Young junto a Crazy Horse de 1969, es excelente”, explica el también percusionista del grupo de bossa nova Cores do Brasil.
Venegas estima que “Hey Joe”, con Jimi Hendrix Experience (1966) es un cover que supera de forma superlativa a su original de 1962 de Billy Roberts y la gran mayoría da por hecho que el afamado guitarrista afroamericano es su autor. Caso contrario ocurre con Ricardo Rey and his Orquestra con “You've Lost that Loving' Feeling”, una canción escrita por Barry Man, Chynthia Weil y Phil Spector, la que califica como la versión más desafortunada de la que tenga memoria.
“Un caso que considero paticular es ‘Lucy in the Sky Diamonds’ de John Lennon. Es difícil determinar si la del exbeatle es mejor que la propuesta de Elton John”, sugiere.
UN "BUEN VINO" SIEMPRE SE AGRADECE
Algo así como “ahogar las penas” en el alcohol cantaba por 1968 Neil Diamond con su balada “Red, red wine”, la cual hacía referencia a un despechado caballero que intenta olvidar un fracaso sentimental con el fruto de la vid. El tema no es de los más conocidos ni exitosos de Diamond, pero sí lo será 15 años después para una banda británica que quiere abrirse paso en el mundo de la música.
El “Red, red wine” al ritmo de reggae de UB40 (1983) es precisamente una de las versiones más veneradas por el locutor de Amor 107.5 de Miami, Florida, Polo Troconis, así como “I Will Always Love You” de Dolly Parton en la voz de Whitney Houston. “Ambas superaron a sus originales”, sentencia.
¿Y alguien puede siquiera pensar que un cuasi “segundo himno nacional” de EEUU es en realidad la adaptación al inglés de una canción francesa? Tal es el caso con otro de los temas favoritos de Troconis, “My way”, inmortalizada por Frank Sinatra, pero su autor no es Paul Anka, sino los galos Gilles Thibaut, Jacques Revaux y Claude François bajo el título de “Como de costumbre”, que relataba el hastío de una relación de pareja sumida en la rutina.
“A mi selección debo agregar ‘She’ en la voz de Elvis Costello, que es original de Charles Aznavour. Pero si de versiones infames hablamos, el CD completo de Bossa N’ U2 es un verdadero desastre”, apunta el también host y productor de Radio Caribe y DJ.
Polo Troconis es de los que cree que los covers son una gran alternativa, pues hay versiones que reinventan y refrescan el sonido de la canción primigenia.
ESOS GITANOS FRAUDULENTOS
René Rincón hace un alto desde New Jersey en su próximo artículo musical que publicará en la revista Playboy para compartir sus preferencias sobre covers. “Hay muchos entre mis favoritos. Pudiera mencionar el ‘Jealous Guy’ que hace Bryan Ferry por su sensibilidad, el de Guns N' Roses de “Live and Let Die” por su fuerza y el de Sinatra de ‘Bad Bad Leroy Brown’ al apropiarse de ella”, comenta quien por muchos años se desempeñó además como locutor en Venezuela.
En este recorrido personal no puede quedar fuera "All Along the Watchtower", a cargo de de Jimi Hendrix, ya que para Rincón esta versión es mucho más popular y reconocida que la obra de Bob Dylan, su verdadero autor.
“Si me preguntan por ‘algo desechable’ de inmediato pienso en el cover que Gipsy Kings hizo de ‘Hotel California’. Los gitanos son los reyes del fraude. No le dieron los créditos a Simón Díaz por su ‘Caballo Viejo’ en ‘Bamboleo’ y luego hacen una versión terrible del tema de los Eagles”, dice de forma implacable.
René Rincón estima que en la mayoría de los casos el cover se trata de “un tributo”, pues es una manera de demostrar admiración y por ello cita el caso de The Beatles al grabar “Roll Over Beethoven” de Chuck Berry, entre muchos otros.