En noviembre se cumplen 10 años del regreso de Soda Stereo, una década después de su gira de despedida, del fin de una de las agrupaciones de rock más populares de América Latina. Un grupo que en su estrellato se mantuvo hasta el final, llenaba con facilidad estadios, conciertos multitudinarios de los que hay suficiente registro.
Forma parte del ideario pop latinoamericano la interpretación del tema “De música ligera” en el estadio de River Plate. Fue durante el último concierto de la banda en 1997. De ese día quedó en la memoria el “gracias, totales”.
Y gracias le dan a la agrupación argentina no solo sus seguidores, sino varios artistas que han sido influenciados por el grupo liderado por Gustavo Cerati, quien junto con Charly Alberti y Zeta Bosio dejó en el cancionero temas como “Prófugos”, “Persiana americana”, “Zona de promesas” y “Planeador”.
Liz Gabriela González Olivera, en su trabajo de grado Soda Stereo: la influencia en la música, prensa y sociedad latinoamericana en los 80 y 90, recuerda: “Soda Stereo abrió camino a la masividad del rock latino al encontrar el modo de romper la disyuntiva rock y pop que desgarró tradicionalmente la música popular latinoamericana. El primero apoyado en los sectores sociales medios y acomodados con fuertes influencias del rock anglosajón y el segundo implantado en los amplios sectores populares y de trabajadores ligados a los ritmos latinos y bailables; unos y otros despreciándose mutuamente. A ese dilema se refirió Gustavo Cerati en 1996 cuando declaró: ‘Somos un grupo pop con una fuerte y absorbida cultura rock”.
La autora cita por ejemplo varios países en los que hubo repercusión de la obra de los argentinos. Cita al periodista Carlos Polimeni cuando afirma que el efecto multiplicador de Soda Stereo, más allá de su propio éxito individual, como mito originario del rock latino como tal, se concentraría sobre todo en México. “Fue el que despertó al rock mexicano. Docenas de grupos mexicanos reaccionaron: ¿por qué no hacemos nosotros esto que vienen a hacer los grupos argentinos? Y eso estalló a mediados de los ochenta en el rock que, a mi criterio, es el más rico y asentado de todo el continente”.
Y no solo fue México, sino también Perú, Colombia, Chile, Bolivia y Venezuela, entre otros.
Como se menciona el caso mexicano, veamos qué decían hace 17 años los integrantes de Café Tacvba, una de las agrupaciones más influyentes de ese país con respecto al trío argentino. “Nosotros no fuimos de los grupos influenciados por . Sí de pronto había una ola. De repente ibas a algún lugar y te encontrabas con cinco grupos tocando como , era una fiebreSoda StereoSoda Stereo”, afirmó entonces al diario La Nación el cantante Rubén Albarrán. El guitarrista Joselo confirmó en 2014 en su columna del diario Excélsior lo querido que era el conjunto en México. Dos años después, Albarrán dijo: “Todos hemos tenido experiencias especiales con la música de Soda. En México fue una locura, lo más maravilloso fue el amor que generaron con su música. Fue una locura, marcaron toda una época”.
Y cuando uno escucha detenidamente la discografía de Café Tacvba, constata ese transitar en sus composiciones. Es decir, si bien los mexicanos tenían una fuerte impronta de los ritmos tradicionales mexicanos en sus dos primeros álbumes, luego emprendieron una etapa más exploratoria, similar al Soda Stereo de sus últimos discos. Y es que la banda argentina contribuyó a allanar el camino de la experimentación entre las agrupaciones, especialmente entre aquellas que vieron a Soda Stereo como referencia primordial del rock en español.
“Soda era un combo total, tenía un tipo que componía y cantaba bárbaro, Cerati, y una de las bases más grosas del rock latinoamericano, Zeta Bosio y Charly Alberti”, dijo al diario español Kevin Johansen el año pasado, a propósito de un homenaje en Argentina a la agrupación autora de "Canción animal". Se realizó en noviembre, y también participaron Café Tacvba, Carla Morrison, Juanes, Illya Kuryaki and the Valderramas, Richard Coleman, Alex Anwandter, Massacre, Banda de Turistas, Indios, Leo García, Tonio Jáuregui de Libido, Juan Ingaramo, Rayos Laser, Walter Domínguez, Rey Hindú y Utopian. Todos con algún vínculo de afición y admiración con la banda, considerada ícono del rock en español, al igual que Caifanes o Los Tres.
Para Juanes, por ejemplo, la música de “abrió las puertas para muchos artistas latinos que pudieron llegar a otros mercados como el estadounidense. Para mediados de los noventa, la idea del rock español era muy fuerte. Luego se fue transformando y en la actualidad encontramos que en las radios suena mucho la música urbana”, según indicó recientemente a La Viola.
Incluso en 2014, luego de la muerte de Cerati, el cantante y composito Fher de Maná reconoció de esta manera el legado: “Se ha ido uno de los grandes compositores de música contemporánea, gran letrista y un ejecutante magistral de su guitarra y su voz. Lo más interesante de y es que crearon un sonido que no era ni británico ni americano, sino un surgimiento de sonoridades bañadas de rock y de sentimiento latinoamericano. Mucha luz para su familia y sus seres queridosCeratiSoda Stereo”.
Shakira y Cerati fueron buenos amigos. El argentino llegó a componer canciones para la colombiana, quien en su más reciente álbum, El Dorado, hay una canción titulada “Amarillo”, un guiño al disco Amor Amarillo del argentino, como ella misma ha dicho. “"Sin darme cuenta lo estaba invocando, lo extraño".
Y es que todos coinciden en que Soda Stereo abrió una puerta, el que les dijo a todos que sí se puede. Y mucho lo hicieron, como dice el vocalista de Maná, “con ese sentimiento latinoamericano”, como bien ha demostrado Juanes, por citar un ejemplo. Claro, no se pude negar la gran influencia en Soda Stereo de grupos como The Police o The Cure en los primeros discos del conjunto.
Pero no se puede negar la impronta, tanto en aquellos que fehacientemente aseguran ser seguidores, como en aquellos que solo indican ser escuchas de refilón. No se puede negar que la influencia está, en todos los sentidos, en la forma de componer como en el atrevimiento de ir por más, de no quedarse en el público más próximo, en demostrar que el rock en español tiene terreno.
