Os Justi Meditabitur de Anton Bruckner
Reseña del artista hecha por:
SongBlog
Esta pieza "Os Justi" es uno de los famosos motetes religiosos de Bruckner. Resulta que él era una persona religiosa y que el trabajo como cualquier otro (como se espera) sale en sus composiciones. La pieza cuenta con muchos altos y bajos y es una pieza para los de corazón. Hay algo tan hermoso y puro sobre la integridad de un coro cantando una obra particularmente religiosa. Te lleva a tales profundidades que todo lo que puedes hacer es estar de pie y maravillarse. Es una lágrima-jerker seguro. La escritura de la parte está en el punto, la mayor parte de él que es cuatro porciones. Hay algunos pasajes en los que el compositor divide las voces de tenor y bajo para crear un sonido potente y rico que está diseñado para llenar la sala. Es importante notar que él hace esta técnica en los momentos exactos en que la pieza está en sus niveles dinámicos más altos, fortissimo para ser exactos. La plenitud (y por el contrario) el cansancio y la soledad del alma se capturan en esta obra maravillosa y sentida. La pieza, como con muchos en esta vena de trabajo, es demasiado profunda en la emoción para que las palabras empiecen a describir.
Las palabras se podían sentir como un tono de disculpa al Señor desde un lugar bajo. Es un llamamiento abierto a Dios. Esta pieza es una súplica a Dios para que sea sanado y sea nuestro sanador. Es en tiempos de tristeza y en tiempos de alegría que esta pieza es adecuada. Los picos altos y bajos de esta sinfonía realmente muestran un tesoro profundo que podría durar para las generaciones venideras y lo ha hecho. Los aplausos no van mucho más arriba que esto. Los altos y bajos se capturan en la grabación en forma espléndida, y deben hacer que la gente se acerque a ella.
Se sabe que Bruckner era un hombre profundamente religioso y trató de capturar gran parte de su filosofía religiosa en su música. Parece que él tiene una cercanía única con Dios y el espíritu. Es seguro que es capturado en magnífica pantalla aquí y en otros motetes que se pueden explorar más tarde. ¡Guauu! ¡Qué hombre y qué compositor! Cualquier persona que se aventurara a componer música sagrada definitivamente debería poner este compositor en su lista de repertorio.