La perspectiva de los Hijos Intemperantes sobre “El hombre sin rostro”
Los Intemperate Sons irrumpieron en la escena del rock alternativo en Dallas, Texas, en el verano de 2019, y se destacaron de inmediato con un sonido que combina riffs de guitarra abrasadores, melodías inquietantes y una cruda profundidad emocional. En 2021, su inconfundible talento llamó la atención de Ryan Shuck y Amir Derakh, leyendas del mundo del rock por su trabajo con Orgy, Dead By Sunrise y Julien-K, quienes contrataron a la banda para su sello, Frame|Work.
Formada por la familia Watson (Keith (batería), Jake (guitarras) y Max (voz, guitarras, teclados) junto con su viejo amigo y bajista Mark Marks, The Intemperate Sons es una banda familiar con una conexión profunda que impregna cada nota que tocan. Keith, un intérprete experimentado conocido por animar a multitudes con proyectos anteriores como Gun Hill, Natural Born Thrillers y Agents of Solace, establece la base lírica y rítmica de la banda. Su trabajo en temas como "Dust to Dust", "The Color Within" y "Unrealized" muestra su capacidad para llegar a los rincones más oscuros de la psique humana, convirtiendo el dolor personal en un rock antémico.
Max Watson, el multiinstrumentista y líder de la banda, aporta una combinación única de versatilidad e intensidad. Sus colaboraciones con Keith en temas como "Way Back When" revelan una voz tan convincente como diversa. El meticuloso enfoque de Max para el trabajo de estudio, donde a menudo crea armonías vocales complejas, garantiza que cada canción resuene a un nivel visceral. Su voz lírica en temas como "Faceless Man" y "Once Again" muestra su talento como la voz de una generación.
Jake Watson, el arquitecto principal del sonido de la banda, es un maestro de la narración musical. Su enfoque innovador a la hora de componer canciones (evidente en temas como "Remission", "Way Back When" y "Wading in the Gray") transforma las letras en narrativas poderosas. Su papel se extiende más allá de la música, ya que su visión artística influye en todo, desde la identidad visual de la banda hasta su presencia en el escenario.
Mark Marks, la fuerza unificadora del bajo, aporta experiencia y ritmo a la banda. Un veterano de la escena musical de Dallas, las contribuciones de Mark al proceso de composición de The Intemperate Sons son indispensables. Sus éxitos anteriores, incluida la apertura de conciertos de íconos del rock como Sebastian Bach, son un testimonio de su talento y dedicación.
Ni siquiera una pandemia mundial pudo frenar a The Intemperate Sons. Frente a desafíos sin precedentes, la banda siguió adelante, colaborando con pesos pesados del rock como Amir Derakh y Ryan Shuck, quienes no solo produjeron dos de sus sencillos más populares, "Game of Keep Away" y "Dark Day's Night", sino que también influyeron profundamente en el sonido en evolución de la banda, especialmente en su segundo álbum, Dark Day's Night, que tuvo una excelente recepción.
Su asociación con Tony Franklin (The Firm, Whitesnake) en su álbum debut, The Color Within, subraya aún más el compromiso de la banda con la excelencia, con el trabajo de bajo de Franklin agregando profundidad a temas destacados como "Dust to Dust" y la canción principal.
Los Intemperate Sons ofrecen una visión convincente del rock alternativo, fusionando la intensidad áspera del hard rock con elementos folk y grunge. Su música es un viaje oscuro e introspectivo que resuena con el alma, generando comparaciones con bandas icónicas como Alice in Chains, Stone Temple Pilots y REM. El vínculo familiar entre el clan Watson se manifiesta en su sonido único: una mezcla de himnos impulsados por la guitarra y armonías vocales intrincadas que resuenan mucho después del acorde final.